Esteban Jiménez y su familia, Premio Dama de Baza a la Cultura 2016

Tal y como queda establecido en las bases, este galardón que otorga cada año por estas fechas el Ayuntamiento de Baza reconoce y valora a aquellas personas o colectivos que tanto con sus obras, como con su participación en distintas iniciativas del campo del arte y la creación, o de fortalecimiento y conservación del patrimonio cultural y etnográfico, hayan contribuido al enriquecimiento de la cultura bastetana.

En este sentido, la Comisión Informativa de Cultura valora la labor artística y artesanal, que da continuidad a un oficio antiguo, heredado de una tradición familiar que se remonta a finales del siglo XVIII en Baza. Esteban Jiménez Escribano ha conseguido rescatar del olvido este trabajo artístico, despertando el interés por el mismo, incluso entre los más jóvenes, y dándolo a conocer entre la población bastetana y de distintos rincones del mundo. El hecho de utilizar, de forma hábil, las nuevas tecnologías de la comunicación para difundir la talla artística ha propiciado que el nombre de la ciudad sea conocido gracias a Esteban Jiménez en multitud de lugares de los cinco continentes.

Esteban Jiménez cuenta que su abuelo Esteban dedicó toda su vida a la talla de madera, y la precisión fue literal. Un día, nada más terminar el trono del Sépulcro de Guadix, los responsables de la cofradía accitana acudieron al taller de la Calle San Lázaro. Viendo el trono terminado, Esteban Jiménez Montoya los atendió, le dio el último toque al trono, se subió a su casa, se acostó y falleció, fue su último trabajo. Esteban Jiménez Montoya se formó profesionalmente en Granada, fue de la generación del famoso tallista Antonio Díaz. A Esteban Jiménez Montoya le sucedieron sus hijos Esteban y Joaquín, ya jubilados. Ahora son sus hijos Esteban, Antonio Jesús y Jesús, dos hermanos y un primo hermano, los que entre todos continúan con el taller, siguiendo las enseñanzas de sus padres, abuelos y bisabuelos y manteniendo viva la talla de madera. La familias Hijos de Esteban Jiménez suma ocho generaciones de prestigiosos tallistas de la madera cuyo origen hay que buscar en Italia en el año 1798.