Inaugurado el Belén de la Iglesia Mayor de Baza

Tomaba primero la palabra el bastetano Alfonso Torres quien, tras una pormenorizada exposición de su perfil, repasó la génesis de esta instalación, los recuerdos y vivencias de la etapa en la que él formaba parte del equipo que se ocupaba de esta instalación y que fueron compartidas por su ahora compañero de atril, bastetano de adopción y enganchado a nuestra ciudad a causa de esta experiencia. Los pregoneros y la directora del Coro de la Asociación Virgen del Rocío de Baza, que ofrecieron un breve pero precioso concierto de villancicos, recibían un bonito obsequio como recuerdo a su participación, salido de las manos del prestigioso escultor Ramón Salarich.Finalmente, el presidente de la Asociación, Manuel Gea, repartió agradecimientos para cuantos han participado y participan de esta bonita experiencia y llamó a la concejala de Cultura, Yolanda Fernández, para que cerrara el acto con unas palabras dedicadas a la trascendencia de este tipo de tradiciones y a los valores que ello supone.A continuación llegó el momento de la inauguración del Belén, por lo que se procedió a encender su iluminación, siendo bendecido por el párroco de la Iglesia Mayor, reverendo José Díaz, tras lo que el numeroso público que asistió a este acto pudo admirar la instalación y expresar numerosos comentarios de admiración sobre la misma.El Belén de este año ubica su escenario en un pueblo que se dedica a la ganadería y la pesca y cuenta, además del Nacimiento, la Huida a Egipto en la que se ha instalado una haima, un palacio y palmeras, con diferentes estampas ya conocidas pero, igualmente, ofrece novedades como la de una casa que acoge un bonito y pintoresco mercado. También se ha recuperado el río, algo que hacía varios años que no se incluía, atravesado con un gran puente de dos ojos, bajo los que transcurre el agua, un poco turbia como más propia de las zonas de montaña por las que discurre. El portal es otra de las novedades de este año, una cueva en la que se representa el Nacimiento.En cuanto a los materiales empleados han destacado el porespán y la espuma proyectada, así como una gran labor de pintura, estando tras todo ello un equipo integrado por 18 personas, de las que sólo cuatro hombres y que han llenado los algo menos de 60 metros cuadrados de superficie con una excelente representación que puede verse a dos caras, si bien el deseo pasaría por hacerlo en el centro de la nave de la iglesia, a cuatro caras, como el mismo Alfonso Torres reivindicaba en su pregón, lo que daría más realce a esta instalación en la que se ha pasado de las 140 figuras iniciales a unas 250 que hay en la actualidad, entre las que están las 16 figuras egipcias que se incorporaron el año pasado.Texto y fotos: Ricardo Cañabate