JOSÉ UTRERA
Miércoles, 23 de abril 2014, 12:00
Cinco personas, tres empleados de las bolsas municipales de trabajo y dos trabajadores municipales, se encargan de eliminar primero los baches y trancos, explanar bien el camino y construir, después, un carril con hormigón, adoquinado y una vertiente de aguas que circunda todo el patio siguiendo la línea de los nichos. De forma paralela, los dos trabajadores municipales encargados del cementerio realizan labores de limpieza y mantenimiento de las cubiertas de los nichos, en donde proliferan plantas. Ya se ha realizado, además, la cura de los espacios de tierra para evitar el crecimiento de malas hierbas y se ha adecuado uno de los patios que están a las espaldas del antiguo cementerio y que se destina a los enterramientos de personas de religión islámica. Entre las próximas intervenciones figura, la creación de un pequeño jardín situado en el aparcamiento antiguo junto a la edificación, y la pintura y mejora del muro perimetral del camposanto.
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