La fiesta de Halloween se consolida con un completo programa de actividades

Por su parte, el Ayuntamiento de Baza lleva ya varios años apostando por fomentar esta fiesta en la localidad, a través de su área de Juventud, desde la que se había organizado la Casa del Terror, en la Casa de la Cultura, como una actividad que siempre ha sido todo un éxito. También este año se han planificado varias acciones más, cada una enfocada a un grupo importante de la población, a lo que se añadía un cambio de ubicación para el Pasaje del Terror.

Desde el viernes fueron cerca de 15 grupos los que pudieron completar el Escape Room de la asociación Delirium, quienes crearon un formato de escape muy interesante y con una gran aceptación entre los participantes.

Una de las actividades más acertadas fue la fiesta de Halloween infantil en la Plaza Mayor, donde los más pequeños, y no tan pequeños, pudieron disfrutar durante dos horas y media de hinchables, pintacaras, juegos y un photocall con chucherías; todo ambientado con música y decoración especial de Halloween, estimándose que cerca de 500 niños y niñas subieron a retratarse en el photocall temático.

Posteriormente, tuvo lugar el tercer certamen del Ribastifest en la plaza de Abastos, un concurso de degustación de picante, solo apto para los más valientes. La cita hizo que la Plaza de Abastos estuviera llena hasta rebosar de público que fue testigo del gran nivel y aguante de los participantes, quienes fueron completando varias pruebas hasta quedar tan solo los dos participantes más tolerantes al picante. El campeón de esta edición fue Alberto, quien se llevó una gran ovación por parte del público.

También el lunes, pero a partir de las 21:30 horas, arrancaba la que fue la actividad estrella del día: un nuevo pasaje del terror en un entorno totalmente diferente a la Casa de la Cultura. La calle Audiencia se convirtió en la entrada del pasaje y, durante algo más de tres horas, las cerca de 720 personas que entraron pudieron «disfrutar» de una experiencia terrorífica de sustos y risas. Fueron muchos los gritos y sustos que se escucharon durante el itinerario gracias a la extraordinaria labor del grupo de voluntarios del Área Joven, quienes una vez más volvieron a ser los protagonistas en esta actividad. Desde el área se hace una mención especial a Jordi Yélamos, por su colaboración en el diseño y creación de este nuevo pasaje del terror.

La programación de Halloween terminaba el martes 1 de noviembre con un autocine del terror, ubicado en el parking de la piscina cubierta. Como ya ocurriera con la película de Grease en verano, fueron muchas las personas que se animaron a probar la experiencia del autocine, participando medio centenar de coches.

Terminada esta intensa programación, desde el Ayuntamiento se quiere dar las gracias a todos los voluntarios que han colaborado en hacerla posible y, de forma muy especial, a Manolo y Mila, los técnicos de Juventud del Ayuntamiento, por su extraordinaria labor durante estos días.