Exposición de Juan Mar en la torre del homenaje de Huéscar

No es casualidad que este premiado edificio sea el elegido por Juan Mar, ya que arquitecto y artista era buenos amigos y para el artista de Castril supone una especie de homenaje a Jiménez Torrecillas y tampoco sorprende a quienes conocen la trayectoria del artista que haya elegido el vidrio de Castril como nuevo soporte creativo.

Así, Juan Mar da un giro radical en su creación artística y presenta un trabajo espectacular en el que el vidrio se convierte en el material con el que el artista granadino sorprende con su particular «Readymade», o lo que es lo mismo, esa ingeniosa y bellísima técnica de recolectar y presentar cualquier tipo de objetos encontrados que en su origen no son artísticos.

La obra de Juan Mar parte del uso de objetos que normalmente no se consideran artísticos, porque no cumplen una función artística en lo cotidiano, sin ocultar su origen, pero a menudo modificados, para convertirlos en obras de arte.

La idea de dignificar objetos cotidianos de esta manera es un desafío para Juan Mar, así como la utilización del vidrio como material escultórico.

Paradójicamente, fue el propio Juan Mar el que impulsó en 2007 un ambicioso proyecto para recuperar el oficio de vidriero que tan especialmente se desarrolló en Castril de la Peña a finales del siglo XVII. De esta forma, además de fomentar y poner en valor a un elemento emblemático de la cultura y sociedad granadina, Juan Mar incorpora el vidrio a la creación artística contemporánea.